Gilberto Guzmán

El presidente de la Comisión de Seguridad Pública del Congreso del Estado, Joaquín Badillo Escamilla, señaló que no se puede permitir que grupos armados que se asumen como policías comunitarios sigan colocando retenes, que son inconstitucionales, en vías carreteras, que en ocasiones terminan en violaciones a los derechos humanos.

En entrevista, recordó que a mediados del 2022 la 63 Legislatura aprobó reformas que reglamentan el funcionamiento de las policías comunitarias y establecen la delimitación territorial en la que pueden operar, porque antes se tomaban atribuciones que no les correspondían.

“En ese sentido se hizo esta nueva ley, en donde ya tenemos claras las reglas y normatividad, en donde la cabeza de sector es única y exclusivamente la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, porque los grupos de policías comunitarias actuaban como juez y parte, realizaban detenciones, investigaciones, no ponían a disposición de las autoridades a los detenidos, ellos mismos castigaban, usaban armas de uso exclusivo del Ejército, y esto no se podía seguir permitiendo”.

El diputado recordó que había muchos excesos de los grupos comunitarios, porque instalaban retenes, de entrada anticonstitucionales, con hombres armados, sin identificaciones, uniformes o patrullas oficiales, y a quien no se detenía les disparaban, lo cual generó múltiples denuncias públicas y la exigencia de regular a estos grupos.

“Nunca más, un retén ilegal en donde por falta de todo lo que ya comentamos, capacitación, conocimiento, regulación, alguna persona pueda perder la vida; estamos trabajando fuertemente, no vamos a dejar de hacerlo”, comentó.

En ese punto se refirió a la reciente reunión de diputadas de la Comisión de los derechos de las niñas, niños y adolescentes con representantes de la UNICEF para buscar estrategias que eviten que los menores sean reclutados por grupos armados.

“Este trabajo debe ser plural, que todas las voces sean escuchadas, que se erradique el reclutamiento de niñas, niños, en estados como Guerrero, donde ponen niños a marchar para mandar esa imagen de impacto”.

Apuntó que “estos grupos a todas luces se ve que lo último que quieren es que haya paz y bienestar en sus comunidades, más bien quieren ser generadores de conflictos, incluso demostrando que no les interesa la vida de un menor, poniéndolos al frente de una posible situación de riesgo, donde si hay personas capacitadas y adiestradas que pierden la vida en un enfrentamiento, qué podemos esperar de niñas, niños y adolescentes, lo rechazamos de manera categórica, hay que trabajar todos los sectores para cerrar filas en este tema”.

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