Gilberto Guzmán

El exgobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, opinó que falta mayor contundencia de las autoridades de gobierno en la atención a la emergencia provocada por el huracán “Otis”, porque además de los daños materiales está la crisis sanitaria, viene la crisis económica y habrá repercusiones políticas, “porque la ciudadanía piensa que se pudo haber hecho un poco más para avisar” que venía un huracán de graves consecuencias.

Entrevistado por el periodista Joaquín López-Dóriga en su espacio de Radio Fórmula, dijo que en Acapulco sigue la emergencia ocasionada por el huracán: “esto no es un asunto que se haya resuelto”, y que se identifican temas prioritarios que requieren atención como el tema sanitario, ligado con la recolección de basura porque hay una gran cantidad de toneladas de basura que están pendientes no solamente en la costera, que es donde se está atendiendo, sino en colonias populares, donde podría estar el mayor riesgo de generar un problema con resonancias en la salud.

Dijo que también está detenida la educación y sobre todo la reactivación laboral, “todos los miles de trabajadores, hombres, mujeres, jóvenes, mayores, que han trabajado en los hoteles, en los restaurantes, que seguramente ya están enfrentando la ausencia de ingresos quincenales por su trabajo”, porque los hoteles y restaurantes están cerrados, no trabajan.

“Entonces el tema de ingreso a miles de familias de Acapulco, que no va a existir y que eso también va a traer como consecuencia una mayor necesidad. Hay muchas necesidades, se ha volcado una gran ayuda hacia Acapulco, pero eso al final de cuentas no va a ser permanente y hay que pensar en lo que viene en los próximos días”.

El exmandatario afirmó que no ha visto a secretarios del gabinete federal recorriendo las zonas afectadas de Acapulco, ni en fotografías, redes sociales o algún periódico.

“El día de ayer vino el presidente de la República, qué bueno que vino el presidente, pero yo creo que es necesario que venga más, el presidente de la República tiene que venir a encabezar los trabajos o la coordinación de todo lo que se tiene que hacer en Acapulco (porque) el daño es histórico, la ayuda debe ser histórica”, comentó.

Indicó que una de las cosas que tienen que hacer el presidente, “y lo digo con respeto a su investidura, es venir a poner orden en todo lo que está haciendo en Acapulco”.

Ante el argumento de López Obrador de que no va a las colonias de Acapulco por cuidar su investidura de las protestas que le puedan mandar los medios de comunicación, Astudillo recordó que siempre que ha habido una tragedia o emergencia como la del huracán Otis, “siempre habrá consecuencias”, y que no se puede negar que hay un gran sentimiento de enojo y malestar en la gente.

“Porque la ciudadanía piensa que se pudo haber hecho un poco más para avisar, pero es un asunto que no se va a resolver porque también creo que nadie de los que están aquí en Acapulco, ni el presidente, ni la gobernadora ni la presidenta municipal organizaron la llegada del huracán, pero sí pudieron haber hecho un poquito más por avisar que el huracán venía y que venía en serio. Hay un sentimiento de enojo, pero también hay un sentimiento de esperanza que les ayuden más”.

Subrayó que el Gobierno federal debe ser más contundente en la ayuda que necesitan las familias damnificadas en Acapulco y en Coyuca, y llamó a poner atención en el tema de salud frente al riesgo de la crisis sanitaria por las condiciones para la proliferación de enfermedades.

Además de que “es urgente que el secretario de Hacienda, la secretaria de Economía, piensen qué van a hacer con la gran cantidad de miles y miles de personas jefes de familia, hombres, mujeres, que no van a tener ingresos en los próximos tiempos y que eso va a generar otra crisis, la crisis económica más grave en la historia de Guerrero, seguramente”.

Rememoró que todos los acontecimientos que han sucedido en Guerrero tienen repercusiones políticas, como ocurrió con el huracán Paulina en 1997, la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014, y que “el paso del huracán-tornado Otis, estoy convencido que va a tener repercusiones históricas, económicas, sociales y también políticas”.

Por estas razones, opinó, las autoridades no pueden estar jugando al huracán y deben poner mayor contundencia en la atención de la emergencia.

“Creo que es un momento también para que se muestre la estatura, la responsabilidad, para que se muestre lo mejor que se pueda tener para los que son hombres y mujeres públicos para atender esta tragedia que se vive aquí en Guerrero (…), venimos saliendo del daño, ahora vienen las consecuencias del daño”, concluyó.

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